Eclipse Hibrido de Sol en 29º de Aries

Un eclipse híbrido ocurre una vez cada diez años, de allí que este eclipse es raro y especial.

El clima que se siente en temporada de eclipses no es común, es como lo que decimos en Venezuela “una sacudida de mata”. Lo que está tambaleando se cae, lo que no está en su lugar se mueve, lo que ya caduco muere. Y nuestros apegos son los que nos generan dolor y sufrimiento, a los que muchos de ellos somos inconscientes porque se instalaron hace tanto tiempo que los hicimos parte de nosotros. Por eso, si se genera alguna emoción que te intranquiliza y saca de tu centro, presta atención y haz algo. Los eclipses nos ayudan a ver donde están esos apegos y esos programas que nos mantienen en el lugar equivocado y como Seres conscientes de nuestro proceso, debemos hacer algo para dejar que la transformación haga lo suyo.

Todo el aprendizaje viene del hogar y con nuestras primeras relaciones, todas nuestras fortalezas y debilidades vienen de allí. Sí! De papá y mamá, ya sea que estuvieron presentes o no.

Para la astrología el Sol y La Luna representan al padre y la madre, respectivamente. Y son ellos los protagonistas de todos los eclipses. En este caso en particular, está presente Plutón (Hades, el dios del inframundo), mostrándonos mediante los vínculos nuestros propios demonios, lo que vemos en el otro y negamos en nosotros. Nuestras propias creencias limitantes que han creado la vida que tenemos hoy y que nos duele, nos genera rabia, vergüenza, resentimiento, sufrimiento, sensación de vacío, soledad, ansias de poder, de control, de salirnos con la nuestra, de vengarnos, de hacer pagar todo el daño que nos han hecho, estos días el ego grita y domina, se hace muy fuerte si seguimos en automático, tomando decisiones de forma inconsciente, buscando resultados inmediatos, eligiendo atajos llenos de estrategias, en lugar de un verdadero camino de soluciones a largo plazo, y con un beneficio de mayor alcance.

Pausa amigos, pausa… Ya no podemos seguir culpando a la noche, a la playa, a la Luna… La responsabilidad es de cada uno de nosotros, y hacer lo que resulta difícil, que lleva tiempo, que puede ser desconocido, que contiene el poder de llevarnos a un rumbo distinto de la vida, marcará la diferencia. Es posible vivir mejor, las oportunidades siempre están disponibles, eres tú quien debe buscarlas, porque aún que vengan a ti, tu distracción no dejará que las veas, llámese distracción a todo lo que te saca de la realidad y es muy probable que allí estés la mayor parte del tiempo. Pero, la inteligencia de la vida siempre nos da sacudidas de realidad, y estos eventos planetarios aceleran los procesos. Claro que siempre podemos elegir, puedes voltear la cara hacia otro lugar y seguir viviendo como vives, o puedes hacerte cargo y liberarte de esas limitantes, de los miedos, de esas frases tan condicionantes como: “esto fue lo que me tocó”, “ya es muy tarde”, “me tengo que aguantar”, “yo soy así”, “me hubiera gustado…” Y tantas otras que nos habla de la sensación de incapacidad para tomar decisiones. Hay muchas formas hoy en día para empezar a tomar consciencia de nosotros mismos, una de ellas es auto evaluar, auto observar de manera muy honesta nuestros descontentos, sin caer en justificaciones, eso es mental, y en esa parte de la mente están todas las limitantes, porque hay otra por descubrir pero para llegar allá hay que trabajar el mundo emocional en primera instancia.

Entonces, evalúa tu vida, observa tus pensamientos, cuál es el que frecuenta tu mente y que genera en tu cuerpo. Con ese pequeño ejercicio te darás cuenta que no tienes control absoluto de ti, que “la loca de la casa” hace lo que quiere contigo y que solo viéndole a la cara, conociendo tus pensamientos, viendo cómo reaccionas impulsivamente, dándote cuenta que tomas decisiones sin darte cuenta, inicias el proceso de autoconocimiento, y una vez consciente no puedes ser indiferente.

Es importante que durante de este proceso de verte y reconocerte te preguntes de qué formas ves la vida, que crees de ella, qué piensas acerca de la humanidad, de estos procesos de cambio y como tu existencia tiene incidencia. Evalúa tu grupo de amigos, si existe afinidad en las ideas, apoyo, trabajo en equipo, si existe honestidad y lealtad. Esté también es otro de los temas importantes del eclipse.

Este eclipse nos está sacudiendo desde hace un mes por lo menos, y unos tres meses más seguirá sintiéndose muy intenso los eventos de la vida. El 21-22 de abril inicia la fase retrógrada de Mercurio, en el mismo grado 15º del signo Tauro donde se dio el eclipse anterior a este, el 8 de noviembre 2022, así que está repaso de Mercurio y este eclipse del 19-20 de abril está directamente relacionado al eclipse pasado. Resumen: Lo que estás viviendo hoy es el resultado de lo que no has sanado, culminado, organizado, comprendido desde tiempo atrás, y si sientes que la vida está retrasando aquello que anhelas, tómalo como una oportunidad para revisarlo, porque hay falta trabajo, falta profundidad, falta compromiso, faltan ingredientes en la receta para que den los frutos que estás buscando. Así que no queda de otra que ponerse manos a la obra.

Ya el evento astronómico pasó, pero el efecto sigue vigente. Si hubo o hay dolor de cabeza, bruxismo, tensión muscular, una recarga de energía, insomnio, pesadez, cansancio, enojo, frustración, depresión… es normal en temporada de eclipses y más en este grado donde se dio el evento.

Recomendaciones:

Pausa, paciencia, auto observación tomando notas de lo que se va descubriendo. Reconocer con honestidad y humildad el lado oscuro de nosotros mismos.

Descanso, tomar suficiente agua, darse mucho amor y compasión.

Y asumir la responsabilidad de las mejoras y los cambios que queremos en nuestra vida.

Recuerda que lo que suceda en temporadas de eclipse es definitivo, por lo tanto, no te aferres a nada, trabaja en ti que en eso sí tienes control, en tus decisiones.

¡Feliz eclipse!

Con Amor,

Yli 🤍

Deja un comentario